Yo no lo olvidé... ¿Y tú?
Por: Mathilda Martín, El 05 de Octubre del 2021
El 2 de octubre de 1968 tuvo lugar la matanza de Tlatelolco, uno de los eventos más memorables del siglo pasado, por su injusticia y abuso de poder, que hoy recordamos como una invitación a luchar por los nuestros pese a los nuestros. Este evento tomó lugar en la Plaza de las Tres Culturas y cobró la vida de más de 300 personas, mayoritariamente estudiantes. Estos alumnos universitarios, jóvenes se presentaron ese día en la plaza para hacer una manifestación pacífica y fueron sorprendidos por el Ejército Mexicano y el conocido Batallón Olimpia. En primera instancia la participación de los militares fue negada por el presidente al mando Gustavo Díaz Ordaz. Gracias a las investigaciones y testimonios de supervivientes sabemos que Aquel día el ejército y el Batallón Olimpia pusieron en acción la “Operación Galeana” para detener a los miembros del Consejo Nacional de Huelga (CNH), organismo generado por estudiantes de distintas universidades de la República, entre ellas la UNAM, el IPN y la Universidad Iberoamericana.
Este evento buscaba ponerle fin a las protestas y cuestionamientos por parte del CNH hacía el manejo político, económico y social del país, exigiendo de esta manera una verdadera democracia. Aunque en su mayoría, como ya se mencionó, eran estudiantes, a éstos también se les unieron profesores, amas de casa, obreros e intelectuales. LA justificación posterior del gobierno fue el papel que México tenía en ese año a manera internacional, por primera vez en Latinoamérica se celebrarían los juegos olímpicos. En esta fecha se reunieron los manifestantes de manera pacífica junto con los oradores principales del movimiento y periodistas, el ejército estuvo presente con la excusa de prevenir disputas sociales. El Batallón Olimpia y otros infiltrados militares se reconocían entre los manifestantes por portar un guante blanco o pañoleta blanca en su mano izquierda. Los manifestantes reprochaban la toma de espacios escolares por parte del Ejército desde el inicio del movimiento y expusieron 6 demandas ante el gobierno:
- Libertad de todos los presos políticos.
- Derogación del artículo 145 del Código Penal Federal.
- Desaparición del cuerpo de granaderos.
- Destitución de los jefes policiacos Luis Cueto, Raúl Mendiolea y A. Frías.
- Indemnización a los familiares de todos los muertos y heridos desde el inicio del conflicto.
- Deslindamiento de responsabilidades de los funcionarios culpables de los hechos sangrientos.
Después de expresar las demandas y minutos antes de las 6 de la tarde de este 2 de octubre un helicóptero comenzó a sobrevolar la zona y mostrar bengalas, las cuales fueron la señal para que los francotiradores del Ejército Mexicano comenzaran la “Operación Galeana”. Los manifestantes intentaron protegerse en la plaza y en el edificio Chihuahua, algunos lograron entrar a apartamentos de la zona, no obstante los militares, sin orden judicial, interrumpieron en estos espacios y se llevamos a cuantos manifestantes pudieron localizar.
A lo largo de los años se han hecho varias estimaciones de las pérdidas de aquél día, pero por las conclusiones a las que se han llegado la suma de muertos ronda por las 350 personas y heridos suma los 2000. Este genocidio fue sin duda uno de los eventos que más han marcado un cambio en este país. Los derechos que fueron quebrantados y que no debemos olvidar son los siguientes:
- Derecho a la vida
- Derecho de libre expresión
- Derecho a la seguridad jurídica
- Derecho a la libertad
- Derecho a la legalidad
- Derecho a la procuración de justicia de los agraviados y sus familias
- Derecho a la integridad personal
- Derecho a la protección contra la detención arbitraria
Este dos de octubre no se olvida, y por coincidencias también se celebra el día Internacional de la No Violencia. Recordemos, conmemoremos y conozcamos nuestros derechos.